martes, 14 de junio de 2016

STANLEY CUP 2016: PITTSBURGH PENGUINS CAMPEONES


            Los Pittsburgh Penguins se han adjudicado el triunfo de forma merecida en la gran final de la NHL, recibiendo la Stanley Cup por cuarta vez en su historia tras las conseguidas en 1991, 1992 y 2009.





            En esta gran final los Penguins han tenido como rivales a los San Jose Sharks, que llegaban por primera vez en sus 25 años de historia a la disputa por el título en la liga más importante de Hockey Hielo del mundo.




            Los Pittsburgh Penguins son mi equipo preferido de la NHL (National Hockey League) desde hace ya muchos años, tal y como os conté cuando escribí mi “descubrimiento” del Hockey Hielo ( http://espiritucafetero.blogspot.com.es/2013/01/descubriendo-el-hockey-hielo.html ), y este año me han vuelto a dar una gran alegría como en la época de los grandes Mario Lemieux y Jaromir Jagr.



            Para llegar a disputar la Stanley Cup, los Pittsburgh Penguins, que habían terminado la temporada con 104 puntos como el cuarto mejor equipo de toda la liga, y segundo de la Division Metropolitan y en la Conferencia Este, eliminaron en la primera fonda de Play-Offs a los New York Rangers por 4-1. En segunda ronda se enfrentó al que había sido el mejor equipo en la temporada regular, los Washington Capitals, a los que eliminaron por 4-2, para finalmente, en la final de la Conferencia Este superar a los finalistas de 2015, los Tampa Bay Lightning, por 4-3 tras un agónico séptimo partido en el que vencieron por 2 a 1.


            El camino de los San Jose Sharks, undécimo en la temporada regular con 98 puntos, tercero en la División Pacífic y sexto de la Conferencia Oeste, también fue bastante complicado, venciendo en la primera ronda a Los Angeles Kings por 4-1. En segunda se deshicieron de los Nashville Predators por 4-3, para finalmente vencer en la final de la Conferencia Oeste a los Saint Louis Blues por 4-2.


            Y una vez conocidos los antecedentes de los dos equipos finalistas de la NHL, vayamos con como se desarrollaron los partidos.



**GAME 1**

32

            El primer partido de la final por la Stanley Cup se disputó el 30 de Mayo en el Consol Energy Center de Pittsburgh. Los Penguins partían como favoritos para esta gran final de la NHL, pero los Sharks intentarían dar la sorpresa.



            Desde el comienzo los Penguins ejercieron una fuerte presión sobre el hielo, aunque les costaba conseguir situaciones claras de gol. Los Sharks se llevaron los cinco primeros face-off del partido, consiguiendo con ello que el empuje local fuese menos efectivo. Poco a poco Pittsburgh se hizo con el dominio del puck y comenzaron a llegar las ocasiones de peligro, desaprovechando una superioridad numérica. Finalmente, a 7:14 para el final del primer periodo conseguían romper la lata y anotaban el 1-0 por mediación de Bryan Rust (asistencias de Schultz y Kunitz), el héroe del séptimo partido de la final de la Conferencia Este ante los Tampa Bay Lightning al anotar los dos goles que les dio la victoria a los Penguins.




            Y una vez rota la lata, rápidamente llegó el segundo tanto de los Penguins, solo un minuto después, en esta ocasión por obra del rookie Conor Sheary (asistencias de Crosby y Maatta) con un disparo cruzado que entró por la escuadra de la portería de Martin Jones. Pittsburgh contó con varias ocasiones muy claras de volver a marcar, pero no pudo materializarlas, llegándose al final del primer periodo con 2-0 para los Penguins.




            El segundo periodo comenzó con los Sharks mucho más ofensivos, y aprovechando la exclusión de Cole recortaron diferencias por mediación del checo Tomas Hertl (asistencias de Donskoi y Burns) cuando solo se habían disputado 3 minutos. Los Sharks continuaron presionando, y el guardameta Matt Murray con sus paradas se convirtió en el principal valuarte de los Penguins, que poco a poco se fueron liberando de la presión.





            Pero poco antes del final del periodo, a 1:48 concretamente, Patrick Marleau hizo el gol del empate para San José (asistencias de Burns y Couture) con un perfecto y rapidísimo giro tras la portería rival. Los Penguins desaprovecharon una opción de Power Play y con este resultado de empate a dos y todo por decidir se llegó al final del segundo periodo.




            El último periodo comenzó sin un dominador claro y con oportunidades por ambos equipos, aunque fueron los Penguins los que comenzaron a presionar y crear más oportunidades de gol, incluso sin materializar una superioridad numérica. Así se entró en los últimos cinco minutos, con ocasiones claras por ambos bandos y Martin Jones parándolo todo, hasta que cuando quedaban 2:33 para finalizar el partido Nick Bonino con un tiro colocado tras un magnífico pase de Letang logró batir a Jones (asistencias de Letang y Hagelin) para darle la ventaja a los Penguins por 3 a 2.






            San José tuvo una última oportunidad al contar con una opción de Power Play a 2:09 del final por exclusión de Lovejoy, e incluso de dos jugadores al cambiar al portero, pero Pittsburgh se defendió perfectamente y se anotó la victoria en el primer encuentro de la serie.










**GAME 2**

21
 (PRÓRROGA)

            El segundo partido comenzó a un ritmo algo más bajo que el anterior, sin claro dominador y oportunidades para ambos conjuntos, pero mediado el primer periodo los Penguins comenzaron a tener un mayor dominio del puck y ocasiones más claras, como un disparo al poste de Kunitz y un Power Play desaprovechado. Este control no se reflejó en el marcador, por lo que se llegó al primer descanso del partido con 0-0 en el luminoso.


            Tras la reanudación, la tónica seguía siendo la misma, con los Penguins más dominadores pero sin plasmar sus muchos lanzamientos a puerta en goles. Por San Jose era Tomas Hertl quien ponía en peligro la portería de Murray, con tres claras ocasiones, una de ellas un lanzamiento al palo.



            Pero finalmente llego el gol que se estaba mereciendo Pittsburgh, que aprovechó un error defensivo para lograr abrir el marcador por mediación de Phil Kessel (asistencias de Bonino y Hagelin) a 11:40 para el final del segundo periodo. Pudieron ampliar diferencia poco después con una opción de Power Play por la segunda exclusión del partido del ex-Penguin Paul Martin, pero aunque dispusieron de varios lanzamientos, el gol no llegó.







            Aunque los Sharks intentaban estirarse, los Penguins seguían creando las mejores ocasiones, como un lanzamiento de Hagelin que se estrelló en el larguero de la portería de Jones. En los últimos instantes del segundo periodo San Jose contó con una superioridad numérica que no hicieron efectiva, por lo que se llegó al final de este segundo periodo con el 1-0 para los Penguins.


            Los Sharks pusieron toda la carne en el asador al comienzo del tercer periodo, con acercamientos muy peligrosos como un disparo al larguero de Tierney. El partido se había vuelto mas duro y las ocasiones llegaban con cuentagotas. San Jose lo intentaba y Pittsburgh se defendía perfectamente e incluso creaba mucho peligro cada vez que llegaba a la zona de ataque, como otro tiro al poste de Kessel o una oportunidad muy clara de Crosby.


            A falta de 4:05 para el final del partido, los Sharks consiguieron la igualada en el marcador gracias a un lanzamiento lejano del defensa Justin Braun (asistencia de Couture) que se coló en la portería de Murray tras golpear en el poste. En los últimos instantes del tiempo reglamentario los Sharks tuvieron opciones de llevarse la victoria, pero Murray consiguió desbaratar esas ocasiones y llevó el partido a la prórroga.






            Y como pasa muchas veces en esos partidos en los que meter un gol cuesta horrores, nada más comenzar la prórroga, cuando se llevaban solamente 2:35 jugados llegó el gol de la victoria para los Penguins, obra de Conor Sheary (asistencias de Crosby y Letang) que batía a Martin Jones, que hasta ese momento había hecho un partido impresionante, con un lanzamiento a media altura que otorgaba a los Penguins de forma merecida el segundo triunfo en estas finales.















**GAME 3**

32
 (PRÓRROGA)

            La disputa por la Stanley Cup se trasladaba hasta San Jose, al SAP Center. Las dos victorias previas de los Penguins obligaban al equipo californiano a vencer en los dos encuentros que se iban a disputar en su casa. Pero fueron los Penguins los que salieron lanzados en busca del gol, y aunque volvieron a desaprovechar una nueva ocasión de Power Play, pronto llegó el tanto merced a un lanzamiento lejano del defensa Ben Lovejoy que tropezó en Polak y se introdujo en la puerta de Martin Jones cuando se llevaban cuatro minutos y medio de partido.








            A los Sharks les costaba reaccionar, se seguían viendo superados por la presión de Pittsburgh, hasta que un perfecto lanzamiento lejano de Justin Braun (asistencia de Thornton) que Matt Murray no llego a ver puso las tablas en el marcador a falta de 10:26 para finalizar el primer periodo.




            A pesar del gol en contra, los Penguins continuaron creando ocasiones en la portería de Jones, especialmente una muy clara de Kessel, pero lo cierto es que poco a poco cedieron ese dominio a los Sharks, jugándose más tiempo en la zona de ataque de los californianos. La defensa de Pittsburgh bloqueó varios lanzamientos de los Sharks, lo que hizo que no se moviese el marcador y se llegase al final del primer periodo con empate a uno.


            Tras unos primeros minutos sin claro dominador al comienzo del segundo periodo, fueron los Sharks quienes tuvieron numerosas oportunidades claras de marcar, entre ellas un tiro al palo de Logan Couture y un Power Play, controlando el partido, aunque Pittsburgh se pudo liberar un poco de la presión en los últimos minutos, hasta el punto de volver a ponerse por delante en el tanteo gracias a un gol anotado por el sueco Patric Hornqvist (asistencias de Lovejoy y Maatta), que desvió un lanzamiento lejano de Lovejoy a falta de 52 segundos para el final del periodo.



            Con el 1-2 para los Penguins comenzó el tercer periodo, con San Jose a la carga en busca del empate y Pittsburgh muy peligroso a la contra. La presión de los Sharks era notoria, y se veía reflejada en la gran diferencia de hits que había hecho hasta el momento y en la gran cantidad de tiros bloqueados por la defensa de los Penguins. El tanto del empate tenía que llegar, y finalmente fue Joel Ward (asistencias de Donskoi y Thornton) quien con un disparo lejano en el último segundo de una superioridad numérica de cuatro minutos por un high-sticking peligroso de Bonino anotó el gol de la igualada a 11:12 del final del tiempo reglamentario.


           
            Los últimos diez minutos fueron un continuo toma y daca por parte de ambos conjuntos, pero sin encontrar el resultado del gol, por lo que se llegó por segundo partido consecutivo al tiempo extra con el empate a 2.


            Nada mas comenzar la prórroga los Sharks contaron con dos muy buenas ocasiones, pero a partir de ahí el control pasó a ser de los Penguins, que llegaban de manera muy peligrosa a la portería de Jones por medio de Bonino, Kunitz y Malkin. Pasaban los minutos del tiempo suplementario y el marcador no se movía. San José contó con otras dos clarísimas ocasiones de Thornton y Pavelski, y finalmente fue  el rookie finlandés Joonas Donskoi (con asistencia de Tierney) quien rompió la maldición que tenían este año los Sharks en las prórrogas (habían perdido las cuatro que habían disputado) y le dio la primera ventaja en el marcador a su equipo en todas las series y la victoria en el tercer partido por 3-2. Ahora la serie final por la Stanley Cup se ponía 2-1 a favor de los Penguins.


















**GAME 4**

13

            El cuarto partido comenzó tras la interpretación del himno de los Estados Unidos por parte de los guitarristas de Metallica James Hetfield y Kirk Hammett, ambos con la camiseta de los Sharks.




            El partido comenzó sin dominador, con los dos equipos tomando mas precauciones que en partidos anteriores y solo dos tiros a puerta en los siete primeros minutos, uno de Thornton y otro de Dumoulin. Y así estaba la cosa cuando llegó el primer gol del partido, anotado por los Penguins por mediación de Ian Cole (asistencias de Kessel y Malkin) que aprovechó un rechace del guardameta Jones cuando se llevaban 7:36 de juego.








            Este gol creó desconcierto en el equipo de San Jose, y los Penguins intentaron aprovecharlo para ampliar la diferencia, creando varias ocasiones de gol que fueron bien resueltas por Martin Jones, e incluso desaprovechando nuevamente una opción de Power Play, la séptima de las finales. En los últimos minutos del periodo los Sharks también contaron con una opción de superioridad numérica por la exclusión de Lovejoy, pero no pudieron consumarla, y de esta forma se llegó al final de este primer periodo con 0-1 para Pittsburgh.



            Y finalmente, cuando se llevaban menos de tres minutos del segundo periodo, los Penguins anotaron su primer gol en situación de superioridad numérica gracias a Evgeni Malkin (asistencias de Kessel y Letang), que de esta forma ponía el 0 a 2 favorable a Pittsburgh.





            Los Penguins no querían que se les escapase este partido como sucedió con el encuentro anterior, y primero Schultz y luego Kuhnhackl estuvieron a punto de anotar el tercero, pero sus tiros fueron repelidos por el poste. Los Sharks lo intentaban, pero entre la buena defensa de Pittsburgh y en última instancia su portero Matt Murray desbarataron todas las ocasiones de los locales, incluyendo una superioridad numérica. Al final del segundo periodo el resultado era 0-2 Penguins.




            El tiempo iba en contra de San Jose, que intentaba una y otra vez acercarse a la puerta de Murray, pero el portero de Pittsburgh se mostraba infranqueable, como en un uno contra uno que le sacó a Marleau. Pero tanto iba el cántaro a la fuente que llegó el gol que recortaba distancias por mediación del sueco Melker Karlsson (asistencias de Tierney y Dillon) cuando todavía restaban 11:52 de partido.





            En estos últimos minutos es cuando se demostró la mayor experiencia de los jugadores de los Penguins en estos partidos importantes, defendiendo con solvencia y sentenciando el partido a falta de 2:02 para el final con un tanto anotado por Eric Fehr (asistencias de Hagelin y Maatta) que le daba la victoria a Pittsburgh por 1-3. Los Penguins se quedaban a una sola victoria de volver a levantar la Stanley Cup.














**GAME 5**

24

            La serie volvía a Pittsburgh para la disputa del quinto partido, con la primera opción para los locales de alzarse con el campeonato y la necesidad imperiosa de los Sharks de conseguir la victoria.


El partido comenzó de manera vibrante, y los californianos salieron lanzados a la búsqueda de la necesaria victoria puesto que cuando apenas se había disputado poco mas de un minuto de juego Brent Burns anotaba el primer gol para San Jose (asistencias de Karlsson y Couture) que les daba la primera ventaja en el marcador durante el tiempo de juego en toda la serie.





            No contentos con el gol anotado, siguieron atacando y antes de cumplirse los tres minutos volvieron a marcar por mediación de Logan Couture (asistencia de Braun), que desvió con sutileza un disparo lejano de Justin Braun. Este 0-2 nada mas comenzar el encuentro parecía presagiar que la serie no acabaría aquí…




            … pero un partido puede dar muchas vueltas, y antes de que se llegase a los cinco minutos, y aprovechando una situación de superioridad numérica por la exclusión de Zubrus, los Penguins recortaban distancias con el gol de Evgeni Malkin (asistencias de Kessel y Letang) tras rebotar su tiro en el patín de Braun, y que de esta forma frenaba el comienzo arrollador de los Sharks.




            El partido estaba loco, y apenas 22 segundos después del tanto de Malkin, el sueco Carl Hagelin desviaba un lanzamiento de Nick Bonino y ponía las tablas en el luminoso. Apenas se habían disputado 5:06 de partido y el marcador ya era de 2-2.



            Ahora eran los Penguins los que estaban lanzados y comenzaron un bombardeo de tiros continuo sobre la portería de Martin Jones. Kessel la tuvo, Kuhnhackl la tuvo, pero las mas claras fueron estando en superioridad un tiro al larguero de Kunitz y otro de Kessel que golpeó primero en un poste y después en el otro tras pasearse sobre la línea de gol.


            El partido estaba roto y las ocasiones se sucedían en una y otra portería, hasta que a falta de 5:13 para el final del primer periodo fueron los Sharks quienes encontraron las redes de la portería de Murray con un tiro de Melker Karlsson (asistencias de Couture y Dillon) que devolvía la ventaja en el marcador a San Jose por 2-3, resultado con el que se llegó al final del primer periodo.




            Los Penguins volvieron a la pista con la clara intención de igualar el resultado lo más rápidamente posible, pero Martin Jones no estaba por la labor y paraba uno tras otro los disparos que le llegaban. Este dominio se vio roto por una absurda exclusión debida a un error a la hora de hacer los cambios, pero tras aguantar con apuros esta inferioridad volvieron a la carga creando nuevas ocasiones sobre el marco de un Martin Jones que estaba inconmensurable, incluso desaprovechando un Power Play.



            El dominio de Pittsburgh en el segundo periodo fue apabullante, pero no pudieron concretarlo en el marcador, por lo que se llegó al final del mismo con el 2-3 favorable a San Jose, con Martin Jones como su gran valuarte en la portería.


            El cerco sobre la portería de los Sharks se mantuvo también al comienzo del tercer periodo, con numerosas ocasiones de Pittsburgh que no conseguían materializar. Los minutos pasaban y la desesperación llegaba a las filas de los discípulos de Mike Sullivan, que se veían impotentes de poder anotar. Los Sharks, por su parte, se defendían con orden e incluso empezaban a crear ocasiones de gol en la portería de Murray, llegando incluso a desaprovechar un Power Play.




            En los últimos compases del partido, con los Penguins a la desesperada y ya sin portero, el capitán de los Sharks Joe Pavelski anotaba el 2-4 (asistencia de Thornton) que dejaba sentenciado el partido a favor de los Sharks. Con este resultado y una pelea entre Crosby y Vlasic terminó el encuentro.




            Los Sharks lograron sobrevivir en Pittsburgh y se hicieron con una victoria imprescindible que volvía a llevar las series a San Jose aunque con la ventaja todavía de los Penguins por 3 a 2. El artífice de esta victoria fue sin duda el portero Martin Jones, que realizó un total de 44 paradas, algunas de ellas verdaderamente increíbles, convirtiéndose en el portero que más paradas ha realizado en un partido de Stanley Cup desde la ampliación de la NHL en 1967.













GAME 6

13

            Si ya de por si la tensión que implica un sexto partido de unas finales no fuese suficiente, el gran capitán de los Penguins Sidney Crosby, que terminó muy caliente el quinto partido, le añadió un punto más cuando soltó su stick contra la pierna de Thornton en el primer segundo de partido tras el face-off inicial. Estaba claro que no iba a haber concesiones de ningún tipo por parte de ambos equipos.


            Los Penguins no querían desaprovechar otra oportunidad de lograr el título y salieron presionando la portería de Jones, aunque con la poca efectividad del partido anterior. Los Sharks se mostraban peligrosos a la contra, como en dos buenas acciones de Pavelski y Nieto que desbarató Matt Murray.



            Y tuvo que ser en una superioridad numérica por exclusión del lituano Zubrus como los Penguins volvieron a perforar la portería de Jones con un lanzamiento lejano del defensa Brian Dumoulin (asistencias de Schultz y Kunitz) cuando restaban 11:44 para el final del primer periodo. Habían transcurrido más de 60 minutos de juego desde la última vez que batieron a Jones, pero el gol los ponía en ventaja en este crucial partido.




            Tras el gol el dominio del puck pasó a ser de San Jose, aunque de forma infructuosa y creando poco peligro. Sin embargo, en los últimos cuatro minutos los Penguins dispusieron de varias ocasiones muy claras de volver a marcar, pero ni Sheary, ni Crosby, ni Kessel fueron capaces de superar a Jones, por lo que se llegó al final del primer periodo con el 0-1 favorable a Pittsburgh.



            El segundo periodo comenzó con los Sharks bombardeando la portería de Murray y los Penguins a la contra con dos acciones muy claras de Bonino y Rust que fueron detenidas por Jones. La presión de los Sharks acabó dando su fruto cuando a 13:33 de finalizar el periodo Logan Couture conseguía anotar el tanto del empate con un lanzamiento que pasó entre las piernas de Murray.




            Pero poco duró la alegría del empate, puesto que un minuto después los Penguins se volvían a colocar por delante en el tanteo con un gol de Kris Letang (asistencias de Crosby y Sheary) que dejaba a San Jose contra las cuerdas.



            El cerco de los Sharks era contrarrestado por la ordenada defensa de los Penguins, bloqueando numerosos disparos y deshaciendo la continuidad del juego local. En los últimos minutos fue Pittsburgh quien dispuso de ocasiones para ampliar la renta, como una de Malkin y Kunitz muy clara así como otra de Crosby, pero el marcador no se movió hasta el final del periodo al que se llegó con el 1-2 para los de Pennsylvania.


            Tras el tiempo de descanso los Penguins saltaron a la pista con la intención de marcar un nuevo gol que les diese tranquilidad para afrontar los últimos minutos, creando algunas ocasiones aunque sin suerte. Por su parte, San Jose atacaba por impulsos, con peligro pero siendo imprecisos, desaprovechando incluso un Power Play sin realizar ningún lanzamiento a puerta en los dos minutos.


            El tic-tac del tiempo pasando empezaba a resonar en los oídos de los Sharks, que incluso tuvieron que superar una inferioridad numérica. Kessel tuvo la ocasión de sentenciar el partido a falta de cinco minutos, pero Jones volvió a hacer otra de sus sensacionales paradas para mantener viva la ilusión de los suyos por lograr el empate.


            Se entró en los dos últimos minutos del tiempo reglamentario con un solo tiro a puerta realizado por los Sharks en todo el periodo. Ya a la desesperada intentaron la heroica sin portero y sin fuerzas, circunstancia que fue aprovechada por los Penguins para lograr el tercer tanto a puerta vacía por mediación de Patric Hornqvist a solo 1:02 para el final, que le daba de esta manera la victoria a su equipo en es sexto partido y en las series. La asistencia para el gol tras bloquear un tiro fue de Sidney Crosby, que en este partido si que ejerció de gran capitán aportando su veteranía y gran juego para el triunfo de su equipo.


            El 1-3 final hizo justicia con lo que se había visto en el hielo durante el partido, y los Penguins levantaron nuevamente la Stanley Cup tras ganar la serie 4 a 2 de forma muy merecida. El mejor jugador de las finales fue Sidney Crosby.


















Ignacio Ortiz

@00CAFETERO